A menudo quiero morir, ¿qué debo hacer?

Esto se debe a que últimamente has estado bajo demasiada presión y necesitas aliviarte física y mentalmente rápidamente.

El futuro es impredecible, por lo que es normal preocuparse por problemas inesperados y si estará preparado para afrontarlos. Es posible que esté pensando en sus actividades diarias o en sus responsabilidades a largo plazo y piense con inquietud: ¿Qué necesito saber? ¿Cómo debo prepararme?

Si crees así, significa que te estás preparando mentalmente para tu situación relevante. Si puedes manejar la ansiedad eliminando posibles obstáculos, eso es genial.

Métodos para aliviar la relajación física y mental:

1. En lugar de pensar una y otra vez en tu mente, es mejor escribir tus pensamientos. Por ejemplo, si estás demasiado ansioso y tienes dificultades para conciliar el sueño, anota tus problemas en un cuaderno al lado de tu cama. Siempre que tengas un pensamiento repentino, siempre puedes volver atrás y analizar esos problemas.

2. No intentes no preocuparte ni decirte a ti mismo que todo estará bien, esto sólo te generará más ansiedad. Cuando la preocupación se vuelve excesiva o cuando resulta difícil controlar inquietudes específicas, hágase una serie de preguntas para evaluar sus predicciones y la probabilidad de manejarlas.

3. Aprender a aceptar la incertidumbre es una forma importante de afrontar la ansiedad. No importa qué tan bien te prepares para el futuro, sucederán cosas impredecibles e incontrolables. Cuanto más aceptes la inevitabilidad, más fácil será lidiar con la ansiedad inesperada.

4. La exposición repetida a una situación temida es una de las mejores formas de reducir la conducta de evitación. El comportamiento de evitación se refiere al comportamiento de reducir la ansiedad evitando situaciones que causan ansiedad. Esto es como beber veneno para saciar la sed. Cuanto más lo evites, más ansioso te volverás.