Después de dar a luz, el médico dijo que prevenira la fiebre puerperal. ¿Cómo prevenirlo?
Evita que otras complicaciones elevadas causen daños más graves al cuerpo humano. Embarazo: Para evitar la fiebre puerperal después del parto se deben tomar medidas de protección durante el embarazo y mantener todo el cuerpo limpio diariamente. En el tercer trimestre del embarazo, evite los baños de asiento y las relaciones sexuales, evite el desprendimiento de placenta y realice controles prenatales a tiempo. Si tiene eccema vulvar, inflamación vaginal o inflamación cervical durante el embarazo, deben tratarse a tiempo. Si tiene anemia por deficiencia de hierro, debe seguir los consejos de su médico. Después del embarazo, debes prestar atención a fortalecer la nutrición y mejorar la resistencia. Durante el parto: prevenir múltiples exámenes vaginales, retrasos en el parto, lesiones cervicales y hemorragia posparto durante el parto, implementar de manera adecuada y efectiva el tratamiento quirúrgico del parto y tratar con prontitud las membranas fetales residuales.
Cuidados posparto: observar estrictamente los loquios posparto y las zonas afectadas, y mantener limpias las partes íntimas o las heridas abdominales todos los días. Preste atención al cuidado médico del cofre, mantenga el cofre limpio todos los días e infunda leche a tiempo para evitar la acumulación de leche. Dieta de fin de mes: Presta atención a tu alimentación, evita los alimentos crudos y fríos y los ingredientes picantes e irritantes, y evita comer en exceso. Consuma alimentos que sean muy nutritivos y fáciles de digerir. que tengas un buen descanso. Debido a que la fiebre del primer día después del parto está relacionada principalmente con la fatiga física de la paciente durante el parto, especialmente la fatiga, las pacientes deben garantizar un descanso adecuado y relajar el cuerpo y la mente después del parto para acelerar la recuperación de energía.
En esta etapa, muchas clínicas ambulatorias de hospitales han implementado tecnología de analgesia del parto para permitir que las pacientes descansen relativamente bien y prevenir dolores evidentes y falta de sueño durante el parto. Mantente hidratado. Debido a que a la paciente le saldrá una gran cantidad de sangre y agua durante el parto, especialmente cuando suda en verano, es muy fácil secarse, lo que provoca un aumento de la temperatura corporal. Por lo tanto, los pacientes deben reponer líquidos inmediatamente para evitar que el cuerpo se recupere. Además, para reducir mejor el riesgo de fiebre puerperal, las pacientes deben prestar atención a mantener la limpieza diaria. Una vez que ocurre la influenza, los pacientes deben tomar medicamentos inmediatamente o someterse a una cirugía bajo la guía de un médico para mejorar la inflamación lo antes posible.