¿Cómo se debe tratar la parálisis?

Los niños con hemorragia intracraneal repentina deben permanecer tranquilos, moverse menos, cubrirse con bolsas de hielo o toallas frías y luego ser enviados al hospital sin problemas. Si se trata de un sangrado difuso se puede tratar de forma conservadora con medicina interna. Si se trata de sangrado local y el hematoma es grande, se requiere extirpación quirúrgica.

Las extremidades paralizadas de los niños se pueden tratar con terapias integrales como acupuntura, masajes, masajes, fisioterapia y fisioterapia. Los hogares pueden equiparse con masajeadores eléctricos y equipos de fitness para fortalecer los ejercicios funcionales y promover la recuperación de los músculos de las extremidades.

Para la polirradiculitis, la prednisona se puede utilizar en la fase aguda a razón de 1 a 2 mg por kilogramo de peso corporal al día. Cuando se produce parálisis de los músculos respiratorios, se debe prestar atención a mantener abierto el tracto respiratorio y dar palmaditas en el pecho con regularidad para ayudar a eliminar la flema. Si tiene dificultad para respirar y su cara se pone azul, debe realizar respiración artificial o utilizar un respirador artificial a tiempo. La acupuntura y la fisioterapia se pueden realizar en miembros paralizados durante el período de recuperación.

La polio requiere tratamiento de aislamiento. La galantamina se inyecta por vía intramuscular a razón de 0,1 mg por kilogramo de peso corporal al día y el dibazol se administra por vía oral a razón de 0,1 a 0,2 mg por kilogramo de peso corporal cada vez. Durante el período de recuperación, se pueden combinar acupuntura, masajes y fisioterapia para mejorar la circulación local, y el ejercicio funcional a largo plazo puede prevenir la atrofia muscular. Se debe ayudar a los niños a darse vuelta con frecuencia para evitar escaras. Si existen secuelas de la deformidad de las extremidades se puede realizar una corrección quirúrgica.

Parálisis causada por tumores cerebrales. Después de la extirpación quirúrgica del tumor cerebral, las extremidades paralizadas se irán recuperando gradualmente.

Para prevenir la polio, no sólo debemos prevenir los traumatismos del parto, la asfixia y la infección de los recién nacidos, sino también completar a tiempo diversas vacunas. Además, hacer un buen trabajo en educación sobre seguridad para prevenir accidentes también es una medida importante para reducir las enfermedades.