¿Qué medicamento es bueno para la presión arterial alta causada por la diabetes?
La diabetes y la hipertensión son enfermedades comunes en personas de mediana edad y de edad avanzada. A menudo se causan y se afectan mutuamente, añadiéndose combustible entre sí y agravando el riesgo de enfermedad vascular. La coexistencia de las dos enfermedades dificulta el tratamiento y afecta el pronóstico. Por lo tanto, mientras se controla el azúcar en sangre, se deben seleccionar medicamentos antihipertensivos apropiados para llevar la presión arterial al nivel estándar.
Cómo elegir de forma razonable los fármacos antihipertensivos. En principio, es necesario reducir la presión arterial sin afectar la reducción del azúcar en sangre y, si es necesario, se debe utilizar medicación combinada. En concreto, la mayoría de los expertos defienden que los inhibidores de la enzima convertidora de angiotensina (como benazepril, enalapril, etc.) sean la primera opción, porque este tipo de fármacos "prex" (nombres comerciales: Lodinin, Kaiboton, etc.) no sólo pueden reducir presión arterial, pero también mejora la sensibilidad de los músculos y las grasas a la insulina sin afectar el metabolismo del azúcar y las grasas. También puede proteger la función renal de los diabéticos; Si no se puede lograr el efecto antihipertensivo ideal, también se pueden considerar otros fármacos antihipertensivos, como el uso combinado con antagonistas de los receptores de angiotensina II (como losartán, etc.), que pueden ejercer un efecto antihipertensivo sinérgico sin afectar la tolerancia del organismo a la glucosa. y aumentar la sensibilidad a la insulina; también se puede utilizar en combinación con bloqueadores de los canales de calcio como la nifedipina (cardiacina, etc.), que pueden reducir la presión arterial sin afectar el metabolismo del azúcar y las grasas.
En general, se cree que para los pacientes con hipertensión que también tienen diabetes, es mejor no usar betabloqueantes (como betaloc), porque estos medicamentos pueden inhibir la secreción de insulina por las células de los islotes pancreáticos. Por supuesto, dado que la condición de cada persona es diferente, el tratamiento debe ser individualizado, por lo que se deben formular planes de tratamiento específicos bajo la guía de un médico.