La generación de células cancerosas es un proceso anormal de las células normales.
(1) Teoría de la mutación genética: la radiación ionizante y la mayoría de los carcinógenos pueden inducir tumores en animales. También son mutágenos eficaces para microorganismos y células animales, y pueden causar directamente daños en el ADN e inducir mutaciones. Los cambios genéticos a menudo conducen a una serie de cambios, como roturas, deleciones e inversiones cromosómicas, que están estrechamente relacionados con la aparición de tumores. En circunstancias normales, las funciones de los oncogenes y los genes supresores de tumores se encuentran en un estado de equilibrio. La función de los oncogenes se mejora mediante mutación, o el gen supresor de tumores se inactiva mediante mutación o eliminación. Como resultado, las células cancerosas proliferan sin control y forman tumores.
De esta forma, las mutaciones genéticas en el proceso de replicación de las células normales provocan cambios en la función celular y producen células cancerosas.
Los virus tumorales portan un oncogén activado y lo integran en el genoma de la célula huésped, transformando así células normales en células cancerosas.
(2) Teoría del trastorno de regulación genética: Las características malignas de las células tumorales no dependen de cambios en la estructura genética, sino que son causadas por trastornos de expresión y regulación genética. Por ejemplo, clínicamente, el neuroblastoma altamente maligno a veces regresa espontáneamente y se diferencia en células ganglionares normales. Por lo tanto, bajo ciertas condiciones, las células tumorales pueden sufrir una reversión fenotípica a células normales.
De esta forma, aparecen bichos en el proceso de expresión celular normal, cambiando la morfología celular y produciendo células cancerosas.