Miembros de un grupo ecologista holandés fueron arrestados por intentar sabotear La chica de la perla. ¿Qué fue esto?
El incidente ocurrió en el Palacio Moritz en La Haya, Países Bajos, donde se encontraba el famoso cuadro de Johannes Vermeer "La joven de la perla". Allí se ha expuesto el pendiente de perlas "Girl". Pero el día del incidente, tres ambientalistas intentaron destruir la pintura: uno pegó su cabeza a la pintura cubierta de vidrio y otro vertió sopa de tomate sobre la figura. Tras el incidente, el museo afirmó que la pintura no sufrió daños y que sería devuelta a la sala de exposiciones lo antes posible, pero que por el momento no estaría abierta al público. Se entiende que la organización ambiental que desencadenó este incidente fue la misma organización ambiental que anteriormente se había opuesto a la popularidad de los combustibles fósiles.
El incidente provocó un gran revuelo en Internet, donde la gente denunció sus acciones como absurdas. Esto es criminal y no aporta nada positivo al medio ambiente.
Estos tres ecologistas han sido detenidos por la policía por dañar violentamente bienes públicos. Su comportamiento es sin duda ilegal y criminal. Este intento de llamar la atención y proteger el medio ambiente mediante la destrucción de obras de arte viola la ley, no tiene ningún efecto positivo sobre el medio ambiente e incluso puede despertar el resentimiento de estas organizaciones.
De hecho, no es la primera vez que grupos ecologistas intentan llamar la atención de esta manera, pero no ha conseguido más que arrestar a los participantes y someterlos a sanciones legales. Su comportamiento no hará que el público preste más atención a la protección del medio ambiente, ni hará que los departamentos pertinentes se comprometan. Sólo dañará el arte y afectará la apreciación del público por el arte.
Este tipo de comportamiento debería estar prohibido en la vida, pero las ideas de dichas organizaciones ambientalistas pueden ser diferentes a las de la gente común. La frecuente ocurrencia de incidentes similares puede hacer que la gente tenga una mayor aversión a las causas de protección del medio ambiente.
De hecho, en la vida real, la protección del medio ambiente es un tema que preocupa mucho a todos los países. Sin embargo, las demandas o suposiciones planteadas por muchas organizaciones ambientalistas simplemente no están en línea con el status quo social actual, y la forma en que atraen la atención destruyendo obras de arte es aún más aborrecible. Quizás deberían cambiar sus costumbres y promover el desarrollo de la protección del medio ambiente; de lo contrario, este comportamiento no tiene sentido.