Beber miel es beneficioso para la salud, pero ¿aún se puede comer miel después de haber envejecido durante mucho tiempo?
La mayor parte de la miel que comemos todos los días se produce mediante un procesamiento secundario y la calidad de la miel en el mercado también es desigual. Al elegir la miel, también debe elegir fabricantes habituales conocidos. La ley alimentaria de China exige que todos los alimentos tengan una vida útil. Generalmente, la miel de los fabricantes de miel tiene una vida útil de 2 años, mientras que la miel de los agricultores individuales tiene una vida útil de 6 meses porque no ha sido sometida a un tratamiento antiséptico.
¿Cómo saber si la miel se ha echado a perder? La miel no contaminada de alta calidad es de color amarillo claro o ámbar, la solución es viscosa y transparente, no tiene impurezas ni precipitaciones, y es suave al recogerla, en forma de filamentos que fluyen continuamente. La miel deteriorada producirá levadura resistente al azúcar, que puede descomponer el azúcar de la miel en alcohol, el dióxido de carbono y el agua se oxidarán en ácido acético. La superficie de la miel en mal estado producirá una gran cantidad de burbujas turbias y, en consecuencia, la textura se volverá escasa. Si viene en un recipiente de plástico, se expandirá. Pero si la miel es cristalina y en capas, densa y tiene partículas completas, no hay de qué preocuparse. Esta situación generalmente se debe a que la gran cantidad de glucosa en la miel se condensa en forma sólida a bajas temperaturas, lo que no afectará el contenido nutricional ni el sabor de la miel en sí y se puede consumir con confianza.
La miel normalizada generalmente tiene un ligero aroma floral y no es fuerte ni picante. Después del deterioro, la sustancia se descompone produciendo un olor a alcohol o acidez, que generalmente no se puede disipar durante mucho tiempo. No se recomienda seguir consumiéndola, de lo contrario afectará la calidad de la miel y provocará ciertos daños al cuerpo humano.
Cómo conservar la miel: la miel debe almacenarse en un ambiente ventilado, seco y fresco, a prueba de luz. La temperatura debe mantenerse entre 5 y 10 °C y la humedad del aire. no exceder el 75%. Al tomar miel, preste atención a la sequedad del recipiente y evite el contacto con demasiada humedad. Apriete la tapa inmediatamente después de su uso para evitar fugas de aire y guárdela adecuadamente para que la miel no se deteriore fácilmente y afecte su rica nutrición. Al mismo tiempo, también existen ciertos requisitos para los recipientes que contengan miel. Debido a que la miel en sí es débilmente ácida y propensa a reacciones químicas cuando entra en contacto con objetos metálicos, se deben usar recipientes no metálicos como cerámica, botellas de vidrio y baldes de plástico no tóxicos para almacenar la miel.