¿Alguna vez has oído hablar de la historia de Sésamo?
Es una historia de terror, el contenido es el siguiente
Había una vez una niña con poros muy dilatados por todo el cuerpo Su madre iba a todas partes a buscarla. Por casualidad, escuchó acerca de las burbujas de sésamo que pueden tratar los poros dilatados, por lo que su madre llenó la bañera con semillas de sésamo para que se remojara. Sin embargo, la niña no salió después de estar en remojo durante mucho tiempo. Al mismo tiempo, su madre estaba preocupada de que pudiera pasar algo, así que fue al baño a comprobarlo.
Resultó que el cuerpo de la niña estaba densamente cubierto de semillas de sésamo. Las semillas de sésamo estaban incrustadas en los poros. Ella las estaba sacando con un palillo. Su madre le dijo que estaba bien. Los poros eran todos parásitos. Los pequeños insectos pueden expulsar las semillas de sésamo.
El valor comestible de las semillas de sésamo
Las semillas de sésamo suelen aparecer como toque final de un plato. Cuando comen estofado, a muchas personas les gusta la salsa de sésamo como salsa para mojar. El sésamo tiene un alto valor nutricional y es rico en grasas y proteínas. Y contiene muchos minerales.
Para las plantas son muy abundantes el nitrógeno, fósforo y potasio necesarios para el crecimiento. Por tanto, el sésamo se puede utilizar como un buen fertilizante. Al fermentar semillas de sésamo no deseadas y usarlas en macetas, pueden promover el crecimiento de las flores. Al ser rico en aceite y minerales, las hojas de las plantas cultivadas son más verdes y la superficie brillante.