Red de conocimientos sobre prescripción popular - Conocimiento del confinamiento - El comienzo del invierno se centra en cuatro aspectos del cuidado. Comienzo del cuidado de la salud en invierno.

El comienzo del invierno se centra en cuatro aspectos del cuidado. Comienzo del cuidado de la salud en invierno.

1. Acondicionamiento dietético: el clima es frío y el acondicionamiento dietético se centra en "nutrir los riñones y prevenir el frío", y debe centrarse en calentar y tonificar. Se recomienda comer más alimentos de origen animal y frijoles, y complementar con vitaminas y sales inorgánicas. Cordero, soja, nueces, castañas, rábanos, etc. Todos ellos son alimentos adecuados que ayudan a nutrir el yin y el yang y aumentar las calorías.

2. Mantenimiento de la vida: El clima es frío en invierno y las plantas se marchitan. Es la estación en la que todo queda escondido y escondido. Las personas deben acostarse temprano y levantarse tarde para asegurar un sueño adecuado, lo que les ayudará a recargar sus baterías y proteger el Yang Qi. Además, aunque haga frío, presta atención a mantener la circulación del aire. Cuando la temperatura sea alta durante el día, abra las ventanas para ventilar y mantener fresco el aire interior.

3. Recuperación espiritual: Todo muere en invierno, lo que muchas veces hace que la gente se sienta conmovida y deprimida. Al comienzo del invierno, debes aprender a ajustar a tiempo las malas emociones y recuperar la calma mental lo antes posible cuando te encuentres en un estado de tensión, excitación o depresión. Estar tranquilo y libre de deseos puede hacer que el aire fluya hacia adentro, lo que favorece la nutrición del organismo.

4. Ejercicio y mantenimiento: En invierno el mantenimiento de la salud, además de prevenir el resfriado y tomar suplementos, potencia el ejercicio físico. también es esencial. El ejercicio adecuado puede mejorar el metabolismo, generar calor, mejorar la inmunidad del cuerpo y reducir las enfermedades. Sin embargo, no es aconsejable hacer demasiado ejercicio en invierno como en primavera y verano. La sudoración excesiva puede provocar resfriados fácilmente cuando sopla el viento frío.